POR: ALEJANDRO SANTANA
Se escucharon ruidos, corrieron rumores, el grupismo dentro del PLD se activo para promocionar a sus adeptos favoritos en torno a la Gobernación de esta Provincia.
Como ruido se escuchó, pero el viento se lo llevó, como aspiraciones de grupos permanecerán soterrados hasta tanto el Presidente de la República tome juramento para un nuevo periodo.
Ahora es imposible, sólo son ruidos, deseos de muchos, pero la alta dirigencia del Partido está en otra cosa en momentos en que los alegatos de perdedores, les ha hecho actuar con cautela y madurez, ni siquiera de manera oficial los que ganaron han celebrado, se han cuidado y han protegido a su militancia, no lo han expuesto.
De las elecciones a esta parte los máximos dirigentes del peledeísmo en la Provincia, han estado tranquilos, apenas se han dejado ver, ellos saben que ganaron que ganaron en buena lid, que la diferencia matemática, les ha dado el triunfo, pero ellos tranquilos.
Pero grupos de intereses han estado presionando a través de rumores, ruidos y protagonismo, promoviendo a los que les interesa que vallan a los puestos que dependen de un decreto, pero en el PLD, todo está tranquilo, sus dirigentes trabajando en el plan de acción que levantarán a partir del 16 de agosto cuando nueva vez sean posesionados, eso se llama Madurez política.
La Gobernación de Barahona, la novia deseada por muchos.
Qué pasa con la gobernación de Barahona: El que surja para ese cargo, será un dirigente con sobrada capacidad para superar las ejecutorias del actual incúmbente, ingeniero Pedro Peña Rubio.
Saldrá del consenso de actores claves de la dirección local, Provincial, del partido morado, o quizás de los aliados, pero será la dirección Provincial en conjunto que decidirá a quien recomendar para ese puesto que ha adquirido una importancia capital.
Después de que por esta Gobernación han pasado figuras como la de Demetrio Nicolás Volquez,, Sucre Muñoz, Altagracia Matos, Eddy Mateo, Carlos Florián y ahora Pedro Peña Rubio, ahí no debe ir cualquiera por el hecho de ser miembro del partido ganador.
Ya esa Gobernación recobró la importancia que deben tener las Gobernaciones Provinciales por ser el ante despacho de la Presidencia de la República, dicho en buen dominicano la representación del Presidente de la República.
Con la categoría que nuestra Gobernación ha tomado en estos últimos cuatro años no es posible que el que sustituya al ingeniero Pedro Peña Rubio, sea simplemente un miembro del partido.
Debe estar adornado con las características que ha exhibido, condiciones, destrezas habilidades, conocimientos políticos, gerenciales y humanos que tiene el actual Gobernador para que Barahona siga progresando.
Peña Rubio ha hecho suyo proyectos desarrollistas que ilustres barahoneros han consensuado a favor de la Provincia, los ha encaminado, ha logrado que el Presidente se comprometa con ellos, les ha dado continuidad y ha sido el mayor compromisario de que eso se haga de la forma consensuada, sus desvelos le han dado condiciones que pocas veces se manifiestan en un político.
Por todas estas cosas los ruidos en torno a nuestro nuevo Gobernador, ruidos han sido, rumores son que el viento se ha llevado y que el tiempo borrará, porque a la Gobernación irá quien decide la dirigencia política Provincial de manera consensuada, pero hay que esperar.
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